PASTA MAR Y TIERRA CON QUESO CREMA

He de confesar como diría la Pantoja, que esta receta fue creada en una noche de deseo incontrolable.

Si como lo oís, era un deseo indómito, no podía dominar mis impulsos, me moría de ganas y es que después de unos días de escasez voluntaria debido a problemilla de salud, me desquité y no os imagináis el placer que se siente cuando consigues lo que tanto ansias........ comerte un plato de pasta calentito y sabroso Ainnnsss!!, sí pequé, pero creo que mi cuerpo me lo agradeció y mi espíritu más.

Y es por ello que aquí me tenias dispuesta a lo que sea, para que vosotros también disfrutéis de un placer así..... Soy muy melomana y me vienen unas cuantas cancioncillas a la cabeza mientras os hablo de esto, pero controlaré este impulso de poneros la cabeza como un bombo y mostraros esta receta que bastante tenéis ya!! ;)




INGREDIENTES

1 Paquete de pasta (espaguetis o tallarines)

8 gambones

1 bandeja de champiñones o (en su defecto una lata de los mismo).

2 terrinas de queso fresco para untar.

4 ajos

pimienta

sal

2 Cucharadas de AOVE

PREPARACIÓN

Ponemos a cocer la pasta con un puñado de sal y cuando el agua rompa a hervir.

Pelamos los gambones y les limpiamos la tripa abriéndolos a lo largo sin terminar de cortarlos del todo.

Pelamos los ajos y picamos muy finamente y los añadimos a nuestra sarten que debe estar caliente y con el aceite incorporado, sofreímos los ajos no mucho y añadimos los gambones limpios y rehogamos a continuación los champis.

Cuando los champiñones estén rehogados añadimos el queso fresco junto a 2 tazas de agua de cocer la pasta y disolvemos bien, puede aparentar muy aguoso pero eso se resuelve enseguida que enfríe un poco y que la pasta termine de absorber el liquido.

Por eso no dejamos cocer más tiempo la pasta y la escurrimos y pasamos directamente a la fuente que tengamos para servir, añadiendo a continuación la mezcla del queso con los gambones y los champis, le espolvoreamos pimienta molida y servimos.




Os vais a chupar los dedos de los pies y cuando se os acaben, continuareis con los del vecino, porque están de morirse y el olor, pufff....... no se puede describir.

Solo espero que los disfrutéis tanto como lo hicimos nosotros en casa.